Traumatismo agudo de la columna cervical

Los traumatismos agudos de la columna cervical requieren un alto índice de sospecha y una prueba diagnóstica minuciosa para detectar daños óseos o ligamentos que, de lo contrario, pueden provocar lesiones en la médula espinal.

Todos los pacientes con sospecha de traumatismo deben ser evaluados y estabilizados utilizando el protocolo de Soporte Vital Avanzado de Traumatismo, comenzando con una encuesta primaria utilizando un enfoque <C>ABCDE.

La evaluación de las lesiones de la columna vertebral debe realizarse inmediatamente después de que se haya protegido la columna cervical del paciente con una restricción manual del movimiento de la columna.

Los pacientes con alteración aguda del nivel de conciencia (Escala de Coma de Glasgow [GCS] <15), déficit neurológico, mecanismo de lesión de alto riesgo, lesiones por distracción, dolor o sensibilidad en el cuello, o disminución de la amplitud de movimiento de la columna cervical, requieren un collarín cervical, precauciones para la columna vertebral y la obtención urgente de estudios por imágenes de la columna cervical.

El traumatismo agudo de la columna cervical abarca una amplia gama de posibles lesiones en los ligamentos, los músculos, los huesos y la médula espinal después de incidentes agudos, que van desde una caída aparentemente inofensiva hasta un accidente automovilístico de gran impacto. Los pacientes pueden buscar atención médica de inmediato después del traumatismo, o de días a semanas más tarde. En todos los casos, se requiere una investigación cuidadosa, para garantizar que no haya compromiso en la estabilidad de la columna cervical, dado que, en casos extremos, la inestabilidad de la columna cervical puede conducir al déficit neurológico progresivo, la tetraplejía e incluso la muerte. Este tema se concentra en el traumatismo agudo de la columna cervical en adultos.