Epidemiología

Según un análisis mundial de las tendencias de la hipertensión, el número de adultos de entre 30 y 79 años con hipertensión aumentó de 650 millones a 1280 millones en el periodo 1990-2019.[5] El estudio también sugería que el 53% de las mujeres y el 62% de los hombres con hipertensión no recibían tratamiento antihipertensivo y que la presión arterial (PA) estaba controlada (recibían medicación antihipertensiva y la PA era <140/90 mmHg) en menos de 1 de cada 4 mujeres y 1 de cada 5 hombres con hipertensión.[5] La tasa de hipertensión ha disminuido en los países de rentas altas, que actualmente presentan algunas de las tasas más bajas, pero ha aumentado en muchos países de rentas bajas o medias.

En los Estados Unidos, las definiciones de vigilancia varían mucho. Utilizando los datos de la encuesta nacional estadounidense de salud y nutrición NHANES (US National Health and Nutrition Examination Survey) de 2017 a 2020, la American Heart Association (AHA) estima que la prevalencia ajustada por edad de la hipertensión (definida como el uso autoinformado de medicación antihipertensiva, presión arterial sistólica ≥130 mmHg o presión arterial diastólica ≥80 mmHg) entre los adultos estadounidenses ≥20 años de edad es del 46.7%, lo que equivale a 122.4 millones de adultos (edad ≥20 años) con presión arterial elevada en los Estados Unidos.[6]​​ La prevalencia aumenta con la edad: utilizando los datos de NHANES 2017 a 2020 fue del 28.5% entre las personas de 20 a 44 años, del 58.6% entre las de 45 a 64 años y del 76.5% entre las de 65 años o más.[6]​ La prevalencia es mayor en los hombres de raza negra no hispanos (57.5%) y en las mujeres de raza negra no hispanas (58.4%).[6]​ La prevalencia es mayor en los hombres que en las mujeres antes de los 65 años de edad y superior en las mujeres que en los hombres a partir de los 65 años de edad.[2][6]​​​​​​​​ El riesgo de por vida es del 90% para hombres y mujeres normotensos a los 55 años de edad y que viven hasta los 80 años.[7]​ Los estudios que utilizan datos de NHANES han demostrado que la disminución en el control de la presión arterial de 2013-2014 a 2017-2020 (54.1% a 48.3%) no continuó durante 2021-2023, y el control aumentó a un 51.1%.[8][9]​

En Inglaterra, la prevalencia de la hipertensión arterial en 2015 fue del 31% en los hombres y del 26% en las mujeres, lo que afecta a más de uno de cada cuatro adultos.[10]

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